“Entre bambalinas”, espectáculo lírico teatral

El pasado 3 de abril, dentro del programa de actividades “Sábados musicales 2025” del Museo de Bellas Artes de Vitoria tuvo lugar la representación del espectáculo lírico musical teatralizado “Backstage”.

El pasado 16 de Mayo, dentro del ciclo “Musika dibertigarria da-la música me divierte” 2025 en el instituto Bertendona de Bilbao tuvo lugar la representación del espectáculo lírico musical teatralizado  “Backstage: el retorno”. 

Como habrán supuesto bien, el segundo es la secuela del primero, dado el éxito cosechado allá donde se ha representado: un espectáculo dinámico que intercala la historia de unos cantantes entre bambalinas antes de salir a la representación, con fragmentos de arias y romanzas conocidas. Una divertida interpretación de lo que se cuece en la parte de atrás del escenario. 

Tenemos la oportunidad de hablar con su creadora, guionista y cantante, la mezzosoprano Adhara Martínez para que nos lo cuente de primera mano.

Adhara, cuéntanos cómo surgió la idea de este espectáculo.

Surgió durante la pandemia: al tener más tiempo empecé a pensar en hacer un guión y poder unir las diferentes arias y romanzas más famosas del repertorio. Se me había ocurrido hacer una cosa que fuera más amena, más dinámica que un concierto al uso y, dado que soy cantante y no guionista en la realidad, me basé en nuestras propia experiencia de grupo: un día después de un ensayo empecé a redactarlo. Ha resultado un espectáculo de teatro musical lírico. 

Cuéntanos qué podemos ver en “Backstage”. 

Backstage, tal y como dice la palabra en su traducción literalmente, sería la parte de atrás del escenario, es decir, entre bambalinas para nosotros: el espectáculo se sitúa en este momento, es un ensayo abierto al público. Por tanto, refleja las vivencias de un ensayo: la trama comienza en la pandemia, momento en que no hay suficientes ingresos por parte de conciertos y actuaciones y a los protagonistas se les ocurre la brillante idea de abrir el ensayo al público. A partir de aquí se desarrolla todo el argumento: se ven los entresijos de los cantantes, lo que dice el uno del otro, del que no se ha estudiado la letra…el resultado es una obra muy natural y dinámica. 

Hace poco habéis estado en Vitoria, ¿cómo recibió el público la propuesta de “Backstage” en los “Sábados musicales” del Museo? La sala estaba a rebosar…

El público de Vitoria nos recibió con los brazos abiertos, recibimos muchísimos aplausos. He de decir que por tema de aforo y de espacio se quedó gente sin poder entrar…¡tenemos la esperanza de poder volver!

¿Qué crees que aporta el marco del Museo de Bellas Artes a la música y en concreto, esta propuesta de organizar los “Sábados musicales” en él? Y lo contrario, ¿qué aporta la música a la vida del Museo?

Es muy positiva la apuesta de la Diputación de Álava por celebrar conciertos  en un sitio emblemático, mágico, lleno de arte y donde se respira belleza por todas partes. De hecho, una vez que entras allí ya estás en un clima artístico. Por otro lado, la música dentro de ese espacio, en mi opinión, enriquece también al mismo. Hay público que va a ver el Bellas Artes y se encuentra este tipo de propuestas y a la inversa, se acerca a ver el concierto y disfrutan de otras disciplinas artísticas. Es un espacio muy enriquecedor, yo creo, una apuesta muy interesante. 

En este punto, tengo que agradecer a Mónica Ezpeleta, Directora de Actividades culturales de la Diputación Foral de Álava, que contara con nosotros para la actuación.

Adhara, eres la creadora, guionista, ejerces de Directora musical y además interpretas a la mezzosoprano en este proyecto…¿cómo afrontas todo el trabajo que conlleva? 

¡Con muchísima ilusión! Dado que es una idea propia, pongo toda la fuerza en llevarla a cabo y que salga lo mejor posible. Ciertamente no hago todos los papeles a la vez: en los ensayos previos se hace más el trabajo de dirección artística, se busca el atrezzo, las coreografías de los movimientos escénicos…es un trabajo más desde fuera y ya una vez en el escenario me pongo en el papel de cantante y actriz, estoy más centrada en eso, aunque es verdad que alguna vez surge tener que corregir algo que crees que no ha salido bien y dar esos pequeños toques como directora.

Junto a ti están el resto de intérpretes: Alberto Núñez (tenor), Jesús Zaballa (barítono) y Georgina Barrios (piano). ¿Cómo es la relación entre los diferentes personajes que interpretáis? 

La relación entre los personajes es muy natural y muy familiar porque surge de nuestras propias vidas, es casi un paralelismo, aunque están un poco caricaturizados. Por ejemplo, en el caso del barítono el personaje es un bon vivant, un disfrutón (es muy gracioso y muy cómico); el personaje del tenor se perfila un poco divo, siempre tiene que dar los agudos, sobresalir…y la pianista es el personaje con el carácter más riguroso dentro del escenario: quiere que todo salga bien y aunque es un ensayo, las notas son las que son, es la que pone orden y en algún momento incluso tiene mala uva porque la sacamos de quicio. Mi personaje es el que acoge a los demás, en ningún momento discute con ninguno de ellos, aunque se suele poner de parte de la pianista porque quiere que todo salga bien.

Por extensión, ¿Cómo es la relación entre vosotros como músicos? 

La relación a nivel personal entre nosotros fuera del escenario es muy similar, como una familia. Nos une este espectáculo, la música y somos amigos, quedamos para vernos en periodos en que no tenemos que actuar. Nos conocíamos previamente del Conservatorio, de haber hecho conciertos juntos. Lo bonito de esta idea es que el guión está escrito para que lo interpretemos nosotros mismos: Jesús, Alberto, Georgina y yo misma. ¡Los personajes llevan estos nombres! Siempre cuadramos las fechas de las actuaciones para poder estar todos, porque los personajes somos nosotros.

¿Qué temas podemos escuchar en este espectáculo? ¿Cómo habéis preparado el repertorio?

Los temas musicales pertenecen principalmente a tres géneros: ópera, zarzuela  y musicales. Este último lo queríamos introducir porque no hay muchos conciertos líricos en los que también se oiga. Puedes escuchar desde “West side story” hasta “Nessum dorma” (con ésta la gente siempre se emociona, gusta muchísimo), pasando por números de zarzuela como  “A Paris me voy”, de “Katiuska”, que es un fox trop o  el brindis de “Marina”. Son arias, dúos y tercetos…me atrevería a decir que alguno no está escrito directamente como terceto, si no que lo hemos ido adaptando para poder participar las tres voces como desarrollo del guión.

Además de la música, el guión incluye bastante comedia…

Sí, la comicidad está presente en toda la obra, es el hilo conductor y era mi objetivo desde el principio: tratar de llevar al público la máxima calidad posible dentro del repertorio operístico y de zarzuela y que a la vez fuese de manera natural y dinámica. Las partes cómicas están todo el tiempo, no sólo como pequeños chistes o gags, si no que los mismos personajes de tenor y barítono desde luego son graciosos. Tanto Jesús como Alberto hacen una interpretación tan cómica que provocan la risa del público más de una vez: uno no sabe francés y hace grandes esfuerzos para poder pronunciar, el otro le fastidia el aria intentando meter un agudo final, hablan en italiano ad libitum…son pequeños guiños que el público agradece porque escuchan de manera muy amena un repertorio que normalmente se canta en escenarios más serios.  

¿Hay mucha parte de improvisación?

Es cierto que nos ceñimos al guión, pero lo cierto es que  ahora que llevamos cuatro años de bagaje y recorrido con “Backstage 1”, el original,  en las representaciones pueden salir puntos de improvisación. Algunos incluso lo hemos incorporado definitivamente. Por ejemplo, hay un momento en que Jesús se pone una camiseta interior de color blanca y cada vez le quedaba más pequeña y un día le dije en escena: “pareces una salchicha rellena de queso”…pues esa frase ya se ha quedado porque es uno de los puntos más graciosos y divertidos de la obra. La obra ya la hemos hecho nuestra y estamos muy cómodos en escena. Esto hace que cada función sea mágica, única e irrepetible. 

¿A qué tipo de público se dirige la obra?

Siempre digo que este espectáculo es para todos los públicos. No está pensado específicamente como un concierto didáctico, pero cuando vienen niños y niñas se quedan encantados ya que es un espectáculo divertido, tienen mucha parte cómica válida para cualquier edad, vienen familias y se lo pasan bien.

Dado el éxito de “Backstage” y como muchos lugares en los que habíais actuado os pedían volver, decidiste escribir una segunda parte de la trama…

Como en las películas, hay una segunda parte, “Backstage: el retorno”. La escribí básicamente porque nos lo pidieron: habíamos actuado en un lugar y gustó tanto que nos quisieron contratar ya para el año siguiente, pero con una propuesta de concierto teatralizado, puesto que el formato había sido diferente y exitoso, así que me comprometí a escribir algo nuevo. Luego en más sitios nos pedían lo mismo, así que tenía que materializar la idea sí o sí. Llevamos unos dos años aproximadamente rodando esta segunda parte, habremos hecho unas 7 representaciones más o menos de “Backstage: el retorno”, así que estamos intercalando ambos espectáculos. 

¿Qué novedades hay en “Backstage: el retorno”? 

El argumento comienza con que el tenor ha dejado tirado a todo el grupo para irse a triunfar en solitario, ya no necesita ni pianista ni compañeros, ahora canta con unas bases musicales que ha sacado de internet y el espectáculo empieza literalmente con el tenor cantando con un altavoz. A partir de ahí van apareciendo el resto de personajes para cantarle las cuarenta… en este espectáculo he incorporado una interprete más, una actriz, que en realidad es nuestra manager.  Su papel es el de ser la representante del tenor, una manipuladora en toda regla…refleja un dilema moral que hemos visto a lo largo de nuestra trayectoria profesional y muchas veces ocurre, el abandonar un grupo para hacer carrera en solitario. El público acaba participando en el espectáculo. 

Este mes habéis representado “Backstage: el retorno” en Bilbao, ¿cómo ha ido?

El pasado viernes,  26 de mayo hemos tenido oportunidad de representar “Backstage 2” en el instituto central de Bertendona, dentro de un programa tan conocido como es ¨La música me divierte”. Ha sido bonito porque es allí donde representamos por primera vez la primera parte. Esta vez, como el público ya nos conocía, venía  con mucha ilusión. Dada su respuesta al finalizar la función, hemos cumplido las expectativas. 

¿Qué obras escuchamos en esta segunda parte de “Entre bambalinas”?

Al igual que la primera, hay obras de zarzuela, ópera y  y musicales. Es verdad que en el primero habíamos incluido obras muy relevantes y hubo que pensar qué otros títulos incluir: están “Memory” de Cats, “Funiculí funiculá”, “el Barbero de Sevilla”, “Granada”,…piezas también muy reconocibles por el público en general. Está siendo un éxito igualmente, estamos muy contentos. 

¿Cómo llevasteis a cabo la preparación de cada espectáculo?

La preparación general la llevamos a cabo en dos fases: una primera que se corresponde más con el texto. En los primeros ensayos se hace una lectura. Luego pasamos a la interpretación. Ver qué queremos conseguir con cada personaje, a dónde queremos llegar, de dónde viene, porqué hace ese comentario….en esta parte interpretativa también entran los movimientos en el escenario, las coreografías, el atrezzo…es una obra tan dinámica que nos estamos cambiando continuamente de ropa; la segunda fase se basa en la lectura de la parte musical que miramos con la pianista, que nos corrige y ayuda ya que ella tambien es repertorista, también nos ayudamos entre nosotros con comentarios aportando cosas que puedan significar mejorar como cantantes o de estilo. Una vez que ambas partes están cuadradas hacemos lecturas completas para tener una visión global. No es lo mismo cantar un aria recién salida al escenario que después de haber estado hablando e interpretando un rol durante una hora.

Das a entender que la utillería es muy importante en la función. 

Tanto en “Backstage 1” como en el “Backstage 2” el atrezzo tiene un papel muy relevante en la obra porque cada ropa que nos ponemos o quitamos nos acerca a la canción que vamos a interpretar en el momento. Por ejemplo, si vamos a cantar “Tonight”  llevamos una falda de gasa de tul morada y una corbata a juego; si vamos a cantar “Marina”, pues un chubasquero,…en la primera parte toda la indumentaria está en un burro de ropa y en la segunda parte hay un baúl del que vamos sacando el vestuario, además de un biombo. Siempre digo que la obra empieza con toda la ropa perfectamente bien ordenada y al final, como nos vamos poniendo y quitando tantas cosas, acaba todo por donde pilla…como la vida misma (risas).

¿Cómo os preparáis antes de cada actuación? 

Nos reunimos unas 2 horas antes del comienzo de la función y empezamos con una parte meramente práctica que es descargar las cosas porque el espectáculo tiene mucho mobiliario (lo hemos reducido en “el retorno” para hacerlo más sencillo), así que nos ponemos a montar la mesa, el espejo, a veces tenemos que llevar el piano…una vez terminada esta parte hacemos un pequeño repaso a los textos que van previos a cada número musical y luego solemos mirar un número de conjunto para equilibrar voces, ver la acústica del lugar, también para encontrarnos cada uno vocalmente en ese momento y con el piano. A continuación, individualmente calentamos las arias que cantaremos…en los minutos inmediatamente antes de salir ponemos las manos al estilo mosqueteros, ya que somos cuatro, y decimos “uno para todos y todos para uno”, subimos la mano y ¡a disfrutarlo!

¿Por dónde habéis girado las representaciones?

Hemos rodado el espectáculo por Cantabria y el País Vasco principalmente: hemos actuado en el Museo de Bellas Artes de Vitoria, en Bilbao y en muchos pueblos de Bizkaiza sobre todo, porque es la zona que naturalmente nos corresponde ya que la mayoría hemos nacido o estudiado allí: Plentzia, Trapaga, Ortuella, Muskiz, Meruelo, Castro Urdiales…entre otros.  Próximamente actuaremos en Pamplona. Siempre nos han acogido muy bien.

Hay fechas próximas de representaciones, ¿cómo podemos seguiros?

Tenemos apalabradas ya unas cuantas actuaciones: Pamplona, Ortuella, Trápaga, Plentzia,….personalmente yo no tengo redes sociales, pero la información se puede encontrar en las propias páginas webs de los ayuntamientos y en las redes de nuestro tenor, Alberto Núñez y de Jesús Zaballa, el barítono, que siempre promocionan y publican todas las actuaciones que vamos a tener. 

Además de docente, eres cantante…cuéntanos qué proyectos destacarías de tu carrera musical.

A nivel profesional estudié Canto en el Conservatorio de Bilbao y el Superior en Pamplona. Actualmente compagino la tarea docente como profesora de música en un colegio con la de cantante: con la obra “Backstage”, con conciertos líricos al uso y oportunidades como las que siempre me ha dado la Coral del Ensanche a la hora de colaborar con ellos en papeles solistas, así como la que he tenido este año dentro de la temporada de ópera de Bilbao cantando un pequeño papel en “Il Trittico” de ABAO. Compaginando ambas profesiones consigo el equilibrio entre estabilidad y autorrealización. Tanto la tarea pedagógica como la de cantante me gustan, ambas aportan experiencias muy gratificantes.

¿Qué aporta el trabajo como cantante y los conciertos en directo a la función docente?

Poder compaginar ambas profesiones te hace estar al día y en contacto con tu parte más artística, con el público, con tu exigencia a nivel vocal y técnica, vas mejorando como artista, como persona, como cantante. Como docente ayuda a explicar de primera mano y poder llevar a tu alumnado hasta ese sitio que tú has logrado alcanzar en el escenario.

¿Cuándo te diste cuenta de que querías dedicarte al canto lírico?

Hubo un punto crucial en mi carrera en donde yo me di cuenta de que quería dedicarme a esto de cantar y de la música:  fue en el 2006 cuando me presenté a unas pruebas que vi anunciadas en el Conservatorio para formar parte del Coro Mundial, un coro formado por personas de múltiples nacionalidades del mundo. Tuve la gran suerte de ser seleccionada y representar a España ese año en la gira que hubo por Sudáfrica y Namibia. Esa experiencia supuso un antes y un después en mi carrera, un hito, un momento a recordar porque por supuesto aprendí muchísimo de mis compañeros, de mis directores, de las obras que estábamos interpretando, de la forma de hacer música, técnicamente fue una experiencia muy enriquecedora. Todo eso fue lo que impulsó que posteriormente yo me dedicara a la música.

Como mezzosoprano, ¿qué haces antes de cada actuación? 

A nivel personal no tengo ningún ritual concreto previo a los espectáculos, pero ese día procuro comer un filete o pasta, es decir, proteína para encontrarme con energía. Mientras estamos montando el decorado siempre llevo mi cacao puro con un poquito de canela y me lo voy tomando poquito a poco porque lo que más miedo me da es encontrarme sin energía en el escenario…es mi pócima al estilo “Obelix” para darlo todo sobre el escenario.

Muchísimas gracias por esta entrevista, Adhara, ¿algo más que añadir? 

Me gustaría mucho agradecer a todas las personas que, después de cuatro años, han hecho posible que podamos continuar con este espectáculo: por supuesto a nuestras familias, que nos apoyan en todo momento, a nuestra mánager, que es parte de la familia y que ha dado un impulso a las contrataciones ya que antes lo hacíamos de manera más autónoma; por supuesto a todas las Diputaciones, Ayuntamientos y entidades que nos han contratado, porque sin su apuesta por programar cultura no sería posible llegar al público: tú tienes un proyecto pero si no se programa nadie va a disfrutarlo ni puede tener éxito….por mi parte también dar las gracias a mis compañeros y compañeras porque somos una pequeña familia, hay mucho cariño entre nosotros, mucha amistad y eso que tenemos fuera del escenario también lo vivimos dentro de él, se nota y es parte del secreto del éxito del espectáculo.

(c) María Brodal, entrevista, texto, fotografías y vídeo