Hoy conocemos a Francisco B. Mirón

Buenos días Paco, felicidades por tus preciosos murales y bienvenido a Cultura Bai.

¿Desde cuándo te dedicas a la pintura?

A la pintura me dedico desde la escuela donde yo era el encargado de hacer los decorados. La imaginación o la inspiración se crea y viene trabajando. Las primeras ideas a la hora de comenzar van llegando, y después todo surge en el momento, improvisando.

Recuerdo que hace años tenías un local en el casco viejo donde estaban todas o parte de tus obras, tuve la grandísima suerte de poder visitarlo. Actualmente, ¿tienes algún lugar donde dejas volar tu imaginación?

Sí, además de a pie de calle, trabajo también en mi estudio, lo cual tiene su parte de encanto y donde encuentro mi tranquilidad.

Son infinidad de fachadas vitorianas pintadas por ti: el Aurora Etxea, la peluquería canina Jarlusa, garajes… lugares por los que pasamos a diario coloreados de una forma tan especial. ¿Qué y dónde estás pintando ahora?

Ahora mismo estoy encargándome de un trabajo muy importante en Ondategui. Os contaré que estoy pintando a gente que ya no está entre nosotros y a través de esta maravillosa herramienta denominada arte, conseguimos preservarlos, recordarlos.

Estoy haciendo una representación de un lavadero con mujeres lavando como antes.

¿Qué tipo de materiales utilizas para realizar tus fachadas?

Todo tiene su elaboración previa. Las fachadas se decoran, y utilizo materiales como barniz para protegerlas.

Además de la pintura mural, ¿trabajas en otras superficies? Imagino que los encargos que te hacen serán todos muy variopintos y diferentes…

Pues ahora mismo estoy empezando a experimentar con acuarela. Es una técnica que no había trabajado hasta ahora y me parece muy agradecida a la hora de conseguir ciertos efectos, por ejemplo con el agua. Podría decir que es una técnica mágica, con mucho encanto.

Tu talento es evidente, ¿qué le dirías a un artista joven que está iniciándose en este campo?

Sin duda les diría que no dejen de experimentar y de aprender. Disponemos de muchas herramientas como la tecnología que nos facilita más el acceso a la formación sin la necesidad de tener que acudir a una academia de forma presencial. Se trata de disfrutar, no de sufrir con lo que se está haciendo.

El calco parecía un pecado en el arte y no lo es. Hay que saber calcar, pues es una técnica como otra cualquiera , y muy antigua por cierto. No me olvido de mencionar otra técnica, el estarcido.

Los trampantojos son otra de tus especialidades, ¿cómo consigues ese efecto tan real?

Trabajando sobre todo con la perspectiva y la profundidad.


Dinos dónde podemos disfrutar de tu arte y dónde podemos encontrarte.

A mí se me localiza siempre vía telefónica y a través de mis trabajos.