La cultura a un click de distancia: VAM app

La Cultura a un click de distancia: La revolución de VAM en Euskadi

En el pasado, existía el pensamiento de que el conocimiento era poder y debía guardarse celosamente, sin compartirlo. Sin embargo, el mundo ha cambiado, se ha globalizado, y las tecnologías actuales refuerzan aún más ese sesgo. En VAM, creemos que lo que nos fortalece como sociedad en Euskadi no es el conocimiento individual, sino el colectivo. Lo que nos hará fuertes es la unión y la democratización de la cultura y la educación para todas las personas que habitan este rico territorio.

Nacimiento y visión de VAM

El origen del proyecto nace de sus dos fundadores: Por un lado, Pau, gracias a su amplia experiencia en el sector cultural organizando eventos y gestionando salas, detectó durante su trayectoria la necesidad de crear una herramienta que permitiera a los promotores culturales una eficiente difusión de los eventos culturales programados. Conocedor del sector de la gestión cultural, Pau no solo ha sentido la dificultad de comunicar los eventos organizados, sino que sabe que es un problema común en el sector. Por otro lado, el otro fundador, Sergio, tuvo una idea similar durante su estancia en el extranjero. Mientras trabajaba en una empresa tecnológica, Sergio tuvo la idea de crear una agenda que tuviera toda la información de los eventos que hay en la ciudad, una herramienta enfocada en el usuario para que siempre supiera qué opciones tiene para poder hacer planes. De la suma de estas dos ideas, en septiembre de 2022 unen su camino Pau y Sergio.

VAM es un proyecto que nació con el objetivo de reunir toda la cultura y acercarla sin sesgos sociales, políticos o empíricos. Buscamos simplificar el proceso de descubrir la oferta cultural local, haciéndolo cada día más accesible para que nadie quede al margen debido a la brecha tecnológica. Queremos ofrecer toda la información cultural, desde un concierto en una iglesia hasta uno en un bar de pueblo, pasando por festivales, conferencias y propuestas que, desde la cultura y el ocio, mejoren el estilo de vida.

La aplicación está diseñada para no pasar mucho tiempo en el teléfono, sino para vivir la vida en vivo y en directo. Sabíamos lo que hacía falta, pero nos sorprendió la dificultad de cómo llevarlo a cabo: cómo hacerlo rentable, cómo generar puestos de trabajo dignos y cómo abarcar tanto con tan poco conocimiento técnico. Fue entonces cuando la perseverancia, la constancia y la suerte jugaron un papel crucial.

Después de un año de preparación y muchos «noes», invertimos nuestro propio dinero en el prototipo. BIC Araba nos brindó la ayuda de emprendimiento con base tecnológica de Ekintzaile, siendo la primera vez que se otorgaba tal ayuda a una herramienta para el sector cultural. Este dato curioso subraya la necesidad de actualización que tiene este sector para enfrentar el tsunami tecnológico.

Tecnología e Innovación al servicio de la Cultura

Actualmente, somos cinco empresas trabajando en mejorar las tecnologías aplicadas a VAM para perfeccionar la herramienta, todas con una idea común: reunir toda la cultura en la palma de tu mano. Porque la cultura, aunque diversa, es una sola, como la humanidad que la crea. Es la única que, en este momento de separación y polarización, nos muestra día a día que son más las cosas que nos unen que las que nos diferencian.

VAM ofrece una aplicación móvil disponible para Android, iOS y cualquier navegador. Su diseño incluye funcionalidades clave como un mapa para descubrir eventos cercanos, un listado de eventos completos, filtros personalizables, y la posibilidad de compartir información sobre eventos con amigos a través de redes sociales y apps de mensajería.

Impacto y proyección de Futuro

El impacto de VAM va más allá de una simple agenda de eventos. Al fomentar la inclusión tecnológica y cultural, no sólo dinamiza la oferta cultural de Euskadi sino que también genera empleo y promueve la innovación. Además, la implementación de inteligencia artificial en VAM no solo facilita la recopilación y difusión de información cultural, sino que también posiciona al proyecto a la vanguardia de la innovación tecnológica. Esta iniciativa tiene el potencial de transformar el acceso y la participación en la cultura, generando impactos económicos y sociales positivos.

Desafíos y Expansión

El camino de VAM no ha estado exento de desafíos. Desde la falta de reconocimiento de marca hasta la necesidad constante de adaptarse a los avances tecnológicos, cada obstáculo ha sido una oportunidad para mejorar y crecer. La expansión futura de VAM incluye no solo consolidar su presencia en Euskadi, sino también extenderse a nivel nacional e internacional, adaptando la oferta a las particularidades de cada región y superando barreras lingüísticas y culturales.

Ser una empresa cultural con base tecnológica presenta desafíos únicos y significativos. A menudo, nos encontramos en una especie de limbo donde no somos plenamente reconocidos ni como una entidad cultural ni como una tecnológica. Las iniciativas culturales tienden a ser percibidas desde una perspectiva más tradicional y artística, mientras que las tecnológicas se enfocan en innovaciones puramente digitales y científicas. Esta dualidad nos obliga a navegar por ambos mundos, enfrentando barreras como la falta de financiación específica, el desconocimiento del sector y la necesidad de justificar constantemente nuestra valía en ambos ámbitos. Esta situación requiere una visión estratégica y una capacidad de adaptación excepcionales para poder integrar y armonizar estas dos facetas de nuestra identidad empresarial.

La Cultura Como Pilar de la Sociedad

En Euskadi, la cultura es más que entretenimiento; es identidad, memoria y proyección al futuro. Iniciativas como VAM no solo facilitan el acceso a eventos, sino que también fomentan un sentido de comunidad y pertenencia. En un mundo donde la digitalización a veces aísla, VAM usa la tecnología para unirnos, recordándonos que somos parte de una rica herencia cultural que merece ser compartida y celebrada.

Desde festivales de música hasta conferencias académicas, desde exposiciones de arte hasta ferias tradicionales, VAM busca democratizar el acceso a la cultura. Creemos que cada ciudadano tiene derecho a disfrutar de la oferta cultural sin barreras y que la tecnología puede ser el puente para lograrlo.

En resumen, VAM no solo representa una herramienta tecnológica avanzada, sino una auténtica revolución cultural que busca unir a las personas a través de la cultura y la educación. Es un proyecto que, con cada paso, reafirma que la unión y el conocimiento colectivo son las verdaderas fuerzas que impulsarán a Euskadi hacia un futuro más inclusivo.