jueves, septiembre 19, 2024
Arte

«Lo más innovador fue crear las ‘Brigadas de la Brotxa'», Veronica Werckmeister

Bienvenida Veronica a CulturaBAI!,

Hace muchos años, concretamente en el año 2009 tuve el placer de trabajar a unos cuantos metros de altura en el mural de El Campillo. ¡Menuda experiencia! ¿Te acuerdas de aquel año?

Claro que me acuerdo! Ese fue el año en el que se empezó a ver todo lo que podía abarcar un proyecto de arte público colaborativo. Fue el año que tuvimos la oportunidad de trabajar (y remunerar dignamente) a artistas y a asistentes de artistas, además de seguir contando con alumnado de IdARTE como asistentes en prácticas. Pero tal vez lo más innovador fue crear las “Brigadas de la Brotxa” que fueron 6 personas entre 16-20 años contratadas para trabajar codo con codo con artistas y voluntarios. Ese año se empezó a ver el carácter transformador (no solo de fachadas) del proyecto.

En 2007 si no me equivoco, comenzó la andadura con el mural «Al hilo del tiempo» en la Plaza de las Burullerías. Cuéntanos cómo surgió esta iniciativa.

Fue todo gracias a la iniciativa y el apoyo de AMBA. En 2005 nos habían pedido realizar un taller de muralismo en su sede de aquel entonces, en la Calle Manuel Iradier. El taller gustó muchísimo y se quisó repetir, pero esta vez en el exterior y a poder ser a gran escala. Ese primer mural, el de Burullerías, lo realizaron personas que se apuntaron (y pagaron) como otros muchos talleres que ofrecía AMBA. Éramos 13 personas, con una gran responsabilidad. Gracias a las vecinas y vecinos del inmueble, el apoyo de AMBA, el departamento de Cultura del Ayuntamiento y en especial la Fundacion de la Catedral de Santa María (que nos repararon la pared y nos pusieron el andamio) pudimos desarrollar el proyecto. Sigo en contacto con muchos participantes de aquel mural y me consta que como yo, la experiencia la recuerdan como dura a la par que emocionante. Creo que todos sentimos un especial cariño hacia ese mural que en aquel momento no sabíamos que sería el germen de tantos otros buenos momentos sobre otros muchos andamios.

Sé que tu especialidad es el trabajo mural, aunque tocas muchas otras facetas artísticas, ¿cómo nació el Itinerario Muralístico de Vitoria Gasteiz?

En 1993, aun en la universidad, pasé un verano en Los Angeles colaborando con una organización llamada SPARC (Social and Public Art Resource Center). Yo iba a echar una mano en la oficina organizando sus archivos, saliendo a hacer fotos de los murales en proceso, etc. pero ya entonces me gustaba pintar y les di mucho la brasa para que me dejaran pintar en algún mural. Por fin cedieron y me mandaron a echar una mano a un mural enorme que estaban pintando 3 artistas en una de las zonas más pobres del downtown. Alli descubrí que el pintar un mural es solo la excusa para conocer las vivencias de todo tipo de personas y de compartir con ellas un objetivo común. Desde entonces he intentado reproducir esa experiencia y compartir es “ideología”. Como dicen que dijo Bertolt Brecht: “el arte no es un espejo para que refleje la realidad, sino un martillo para darle forma”. Y yo añadiría que en la acción de crear arte cambiamos, como personas y como colectivo.

Es una explicación larga para decir que cuando llegué a Vitoria en 2001 venía con esta historia y por fortuna mi hermana Christina reconoció en ella un potencial que tal vez ni yo veía. Ella supo darle forma, atraer aliados como AMBA y en aquel entonces Brenan Duarte (responsable de los talleres de AMBA) y poco a poco íbamos sumando adeptos….lo mismo que aquel verano de 1993, dimos la brasa para que nos dejaran pintar!

¿Cuál dirías que es tu mural favorito?

Es imposible decantarme por ninguno. Ahora vemos los murales ya hechos, pero para mí cada uno me recuerda a las personas que colaboraron en ellos, los momentos entrañables que se vivieron en el andamio, el calor, las tormentas, los problemas y la labor colectiva de encontrar las soluciones.

Componentes que colaboraron en los murales

Qué suerte tuve de diseñar el recorrido de las visitas guiadas hace muchos años, ¿te acuerdas? fue una gran experiencia para mí. ¿Actualmente se siguen haciendo?

Las visitas las seguimos haciendo. Desde el principio ha sido importante dar a conocer el cómo se hicieron los murales porque mucha gente no se imagina que se pudieran concebir y ejecutar esas grandes obras de arte entre tantas personas. Las mejores visitas son a las que vienen vecinos y vecinas de Vitoria. Se quedan asombradas cuando escuchan que personas como ellas participaron en la ideación y pintura de los murales. Las guías (como tú misma) son todas personas que han participado en algún mural y por ello consiguen transmitir lo que no se ve: el proceso de creación.

Explícanos cómo funciona la jerarquía y la colaboración de los participantes que trabajan en los murales.

Cada taller consiste en una (o dos) artistas profesionales que dirigen el tinglado! Son los responsables de diseñar la metodología de creación colectiva con el objetivo de que sea altamente participativo. Después de 2 semanas de reuniones se genera el material suficiente para que la persona directora realice un boceto a escala basado en ese material. A partir de allí crean un plan de trabajo para la ejecución. En cada mural este proceso se ha desarrollado de diferentes maneras, pero siempre haciendo hincapié en que todos los pasos de la creación estén abiertas a todas las personas participantes. 

Los participantes se comprometen a asistir a los talleres un mínimo de horas a la semana, y lo mismo en la fase de producción. El objetivo es crear equipo, todos remando en la misma dirección. La jerarquía como tal existe para facilitar la ejecución a tiempo del mural (todo el proceso dura 6 semanas, ni un día más!), pero ante todo es una labor colaborativa.

¿Recibís algún tipo de ayuda en cuanto a materiales?

A lo largo de los 12 años del proyecto hemos recibido apoyo de numerosos comercios, empresas, asociaciones e instituciones. Desde una tienda de pintura de barrio (Pinturas Bello), hasta la Fundación Vital, y muchos más. Y por supuesto el propio Ayuntamiento (de diferentes colores políticos en esos 12 años), que supo confiar en un proyecto de arte comunitario. Aunque ahora el tema de los murales esté más normalizado, en los comienzos fueron personas valientes y con visión que apostaron por él. Las propias comunidades de vecinos de los edificios donde están pintados los murales son los primeros que se tiraron a la piscina, cediendo sus fachadas, sin saber si quiera qué se iba a plasmar en ellas. A todos ellos estamos muy agradecidas.

¿Qué proceso conlleva el mural desde su inicio hasta que el andamio se retira de la fachada?

Lo primero siempre es encontrar la fachada y asegurarse los permisos. Se elige un artista para dirigir y se conforma el taller con un llamamiento publico a participantes. Una vez conformado el grupo se empieza a trabajar en reuniones de creación durante 2 semanas, y de seguido cuatro semanas de pintar el mural. Una vez finalizado se celebra con una gran fiesta de inauguración. Hay que celebrar la hazaña!

Pintando una fachada en la calle Francia de Vitoria-Gasteiz

Las pinturas que utilizamos en los murales tienen que tener cierto aguante teniendo en cuenta que vivimos en una ciudad como Vitoria y llueve muchísimo. ¿Se utiliza algún material específico para que perduren en el tiempo?

El tema de los materiales siempre ha sido muy importante, igual que la preparación correcta de la fachada antes de pintar. El arte comunitario a veces se considera un arte “menor”, que no está a la altura de otras expresiones artísticas más reconocidas. Pero nosotras nunca lo vimos así. Un mural comunitario merece el mismo trato que si fuera pintado por la artista más famosa del mundo. Es decir, los materiales son los mejores que hay en el mercado. Pintura de artista con características especiales para que se mantengan lo máximo posible en el exterior, durabilidad, resistencia a la luz, etc. No hay más que ver lo bien que se mantienen a pesar de nuestra climatología. Eso sí, no dejan de estar echas de pintura y no mármol….de allí que el muralismo siempre ha sido un arte efímero.

Y del casco viejo a Zaramaga… me comentaste que es ahí donde tenéis vuestra oficina. ¿Algún mural en el que habéis trabajado por este barrio y que te gustaría destacar?

Empezamos a trabajar en Zaramaga con el mural del 3 de marzo en 2013. Es tal vez el más reconocido. Y hasta el 2016 se hicieron 1 al año en el barrio. Se han tratado temas como la naturaleza, las personas mayores y la migración. Todos fueron proyectos importantes y siguen siéndolo. Para mi fue muy bonito “en la cresta de la arruga” que se pintó en 2014, dirigido por Eva Mena y Nahikari Mora. El tema se enfocaba en las personas mayores e hicimos un gran esfuerzo para “reclutar” a personas mayores para que tomaran parte en el taller. Mas de la mitad eran personas entre 65-79. 

Zaramaga es un barrio que tiene aún mucho más que decir y se va desarrollando con otras muchas iniciativas que parten de las asociaciones, de los centros educativos y de los propios vecinos y vecinas. Es un barrio generoso y orgulloso. 

Es todo un lujo tener un «museo a pie de calle». Me encanta que cada vez los murales sean más visitados y reconocidos por todos los ciudadanos y turistas que visitan nuestra ciudad. ¿Suelen ser respetados por los viandantes?

La verdad es que es un orgullo tener estas obras en las calles. Incluso para los que no conozcan sus orígenes se respetan y se cuidan. Se han convertido en parte de nuestro entorno y yo creo que habla muy bien de lo que es Vitoria. Una ciudad diversa y divertida, critica e inquieta, y desde hace unos años, con un poco más de color.

Werckmeister es tu marca corporativa. Háblanos a qué te dedicas además de a la pintura mural.

Después de tantos años me dedico exclusivamente a proyectos de muralismo y creatividad. Supongo que ya no sabría hacer otra cosa.

¿Algún proyecto a corto plazo que te gustaría compartir con nosotros?

Esta semana he empezado un taller con la Asociación de personas con Discapacidad Visual de Álava. Ayer tuvimos la primera reunión con los participantes, y estoy emocionada por poder experimentar con formas de crear un mural accesible para estas personas a través de las texturas, los colores y la composición. Será una aventura en la que voy muy bien acompañada con personas dispuestas a experimentar y dar ideas…. A ver que sale! Se podrá ver en la fachada de su sede en Zabalgana a mediados de octubre. 

Dinos dónde podemos encontrarte.

No es difícil encontrar a alguien estos días y menos a mi que tengo 3 paginas web!

www.werckmeister.eus

www.muralismopublico.com

www.bigpaint.net

(c) Raquel Aguilar Díaz, entrevista; Veronica Werckmeister, fotos

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