sábado, marzo 22, 2025
Deportes

Cross Tres Playas de Donosti desde dentro

El pasado domingo, 13 de octubre, se celebró en Donosti la trigésimo cuarta edición de esta carrera popular. Estábamos ante un recorrido urbano, totalmente llano y adecuado para todo tipo de corredores. Con llegada y salida en la playa más donostiarra, Ondarreta, bordea La Concha La Zurriola, rodeando Urgull en el tramo de vuelta.

Amanecía despejado, en una de esas mañanas de verano que nos regala el otoño. Cada visita a esta ciudad, que tanto me ha marcado, me devuelve por unos instantes a la infancia, de la mano de mi padre, a mis años universitarios, redescubierta con la mirada de mis amigas. He recorrido Donostia a pie, en bici, incluso en tándem. Me aventuré a trotarla en una pasada edición de la gimnástica de Ulia. Dos años después, me sorprende el planteamiento de esta marcha, bien planteada, que permite disfrutar a iniciados y dar lo mejor de sí a los más avezados.

Se proponen cuatro cajones de salida, para marcas inferiores a cuarenta, cuarenta y cinco o cincuenta minutos y el último, para tiempos superiores a una hora. Mi compañero Ángel Martínez, última víctima arrastrada en este inexplicable gusto mío por las carreras populares y colaborador de CulturaBAI, nos incluimos en este último, en el de los corredores sin otra pretensión que la de terminar el reto y disfrutar sufriendo. Guardaré mi número en mi álbum de dorsales, con el recuerdo de otras carreras compartidas, muchas en solitario, pero siempre con amigos apoyándome dentro o fuera del circuito, como en la vida misma.

Las caras de los corredores desbordan nervios e ilusión. También sorpresa, ante una mañana soleada, que tanto facilita un evento así. Calentamiento, cronómetros en marcha, impaciencia y ganas, muchas ganas. En los altavoces, una canción mítica, Don´t Stop Me Now, de Queen. Una de esas canciones que no pueden faltar en una fiesta, porque una carrera popular, siempre lo es.

Esos días azules y ese sol de la infancia…” , Antonio Machado.

Mi ritmo de más de siete minutos el kilómetro me permite observar el coqueteo de los azules del cielo con los de las aguas del cantábrico, escuchar las pisadas, apreciar los ánimos del público, voluntarios y organizadores. Cada cajón es un equipo, la deportividad se respira, la competición es con uno mismo. Es una carrera muy local, pero en Donosti, lo local es un abanico de culturas. Los vascos nos abrimos al mundo desde el principio de nuestra historia y en contrapartida, lo acogemos e integramos. La clasificación final tiene apellidos vascos, castellanos, gallegos, catalanes, franceses, ingleses. 

En esta edición, la más multitudinaria hasta la fecha, participamos 1.752 mujeres y 1719 hombres, superando, por primera vez, la participación femenina a la masculina. María Lasa e Unai Ibarra, fueron los ganadores, con un tiempo de 31’19’’, para el arrasatear y de 35´19´´, para la irurarra.

(c) Beatriz Rey, texto; Ángel Martínez, foto; Organización del Cross Tres Playas, mapa de la prueba

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *